En Lumafe creemos que la forma en que criamos a nuestros hijos puede transformar el mundo.
La crianza respetuosa no se trata de dejar que los niños hagan lo que quieran, sino de entender sus emociones, acompañarlas y enseñar con empatía, no con miedo .
Cuando un bebé llora, no busca manipular: busca comunicar.
Cuando un niño explora, no se desafía: aprende.
La mirada respetuosa nos invita a escuchar antes de corregir , conectarse antes de educar y recordar que la infancia no vuelve, pero sí deja huellas para toda la vida .
🌿 También, practicar una crianza respetuosa es un reflejo de cómo nos tratamos a nosotros mismos.
Aprender a reconocer y gestionar nuestras emociones como adultos nos permite ser más pacientes, más compasivos y más presentes con nuestros hijos.
Porque si a veces ni siquiera entendemos nuestras propias emociones, ¿cómo podríamos entender las suyas?
La crianza respetuosa es un camino compartido: crecemos nosotros y hacemos crecer ellos .
Hablar de empatía es mirarnos con honestidad, especialmente en los días de presión o cansancio.
Durante años asistió a una terapia y aprendió herramientas valiosas que me ayudan a mejorar cada día como persona. Nunca está de más leer un buen libro o escuchar un podcast que nos inspire; siempre hay algo nuevo que aprender, incluso en los lugares menos esperados.
Amar a nuestros hijos también es sanar y abrazar al niño que llevamos dentro .
En Lumafe acompañamos ese proceso con productos naturales, suaves y seguros, porque cuidar su piel también es cuidar su corazón… y el nuestro .